Contribuciones de la neurociencia social en la intervención con familias desintegradas
Palabras clave:
Neurociencia social, familias desintegradas, trabajadores sociales.Resumen
Cada año que una niña o niño menor de 3 años vive en un albergue, pierde 4 meses de su desarrollo (Fornara, 2017). Para el 2016 en el Perú, 4 de cada 100 niños no vivían con sus padres biológicos y 2 de cada 100 niños habían perdido a sus padres (INEI, 2016). Los niños, niñas y adolescentes se separan de sus familias por maltrato activo, negligencia, problemas de internalización, conductas antisociales y autodestructivas, inestabilidad emocional y rechazo social. Es relevante incluir el enfoque de neurociencias sociales en la intervención del trabajador social con niños y familias, integrando el conocimiento sobre el desarrollo cerebral y relación con las experiencias de los niños separados de sus familias; cuyos efectos aumentan su riesgo de depresión, conductas disruptivas, apegos inseguros, ansiedad y trastornos psicóticos. Objetivo: Valorar los aportes de la neurociencia social para la intervención del Trabajador Social con familias desintegradas. Método: Investigación cualitativa de análisis documental, de tipo descriptivo con diseño sistémico. Participantes: 8 familias con 26 miembros en total y el profesional de Trabajo Social de la institución. Conclusiones: En la intervención del Trabajador Social en Centros de Atención Residencial es significativo realizar un diagnóstico especializado sobre el funcionamiento cerebral en la percepción social, la navegación en el mundo social, las relaciones sociales y el rechazo social que son transversales a los riesgos que originan la desintegración familiar; así como modelar y retroalimentar las decisiones en la autocomprensión, autorregulación, actitudes y prejuicios a partir de un programa de estimulación cognitiva social.